Federico San Sebastián. Abogado, Secretario General y del Consejo de Iberdrola (retirado)

 In Conversaciones Baleman

Arrancamos un ciclo de conversaciones abordando a una selección de personajes relevantes del mundo de la Empresa, las Finanzas y el Derecho. Hemos decidido comenzar  por Federico San Sebastián, (Bilbao, 1942). Abogado ya retirado, que desde 1979 hasta 2012 ha estado presente en el Consejo de Iberduero y luego de Iberdrola como Secretario y Letrado Asesor. A lo largo de su vida profesional, Federico, tuvo la oportunidad de conocer y tratar a personas clave de la vida política y empresarial de este país.

La entrevista discurre de forma coloquial y espontánea, sin guión alguno, como una charla muy agradable. Así, empezamos por la importancia de los idiomas. Federico nos dice que tanto a sus hermanos como a él, desde bien pequeños sus padres les organizaban los veranos en el extranjero, con lo que a la mayoría de edad podían expresarse cumplidamente en varios idiomas. “Esta circunstancia fue clave para conseguir mi primer empleo en Petronor”, empresa donde en sus inicios fue decisivo el concurso norteamericano tanto en el Capital, como en el proyecto de Ingeniería o en el suministro de crudo de petróleo.

Os dejo con sus palabras, llenas de sabiduría, y que me han resultado inspiradoras:

Aprendizaje con norteamericanos: El valor de una organización simple y eficaz y de la ética del trabajo

 

 De los 002-daily-inspirations-363americanos creo que tuve la oportunidad de aprender muchas cosas. Disponían de una organización simple y eficaz; salían del trabajo a su hora, siendo las horas extraordinarias una alternativa muy rara; sabían delegar, nadie era imprescindible; todos  los jefes disponían de un adjunto que les podía sustituir en cualquier ocasión y que, normalmente, les relevaba a su jubilación En este sentido, recuerdo a un alto responsable del proyecto al que le correspondían sus vacaciones, justo en el momento de la puesta en marcha de las instalaciones de refino. El titular se puso a disfrutar de su merecido descanso, sustituyéndole el suplente, sin mayores problemas. Claro que esto exigía una consideración inequívoca del valor de la lealtad.

Tuve también la inmensa suerte de que se fijaran en mí para desempeñar un puesto directivo para el que no tenía la menor experiencia, si bien pude contar con colaboradores muy experimentados que me ayudaron, decisivamente, a superar la prueba. La suerte… ¡ese factor tan importante en la vida!

Los americanos me enseñaron a hacer de todo. Las cosas había que resolverlas y nada de disquisiciones teóricas. Lo mismo iba a una oficina pública a registrar una petición, que gestionaba el traslado de los muebles de un ingeniero americano, que informaba unos contratos de construcción de buques o de cesión de tecnologías .Lo que querían eran soluciones y se dirigían a mí porque hablábamos el mismo idioma.

Me llamaba mucho la atención la extensión y minuciosidad de los contratos, que comprendían todos los supuestos imaginables Nada de remitirse a un ordenamiento, en parte porque en su sistema jurídico difícilmente podría hablarse de un Derecho Común o Supletorio. Todo estaba allí, en el texto contractual, que normalmente era un “tocho” y que iba precedido de un listado de definiciones de cada concepto, para que no hubiera dudas.

Recuerdo, además, la precisión que se empleaba: por ejemplo, entre las causas de fuerza mayor se incluía la guerra (civil o internacional), pero se añadía “declarada o no”, por aquello de que la guerra de Viet Nam no fue declarada.

El Plan Estratégico: Trazar un rumbo, seguirlo y…….corregirlo

 

descarga (1)Por supuesto que hay que disponer de Planes Estratégicos en las grandes corporaciones, que, como me dijo en una ocasión una figura relevante de las finanzas, rara vez se cumplen. Pero, como en navegación, hay que trazar un rumbo y seguirlo estrechamente. El Plan va adaptándose a la realidad, a medida de su desarrollo. Pero, en ocasiones, hay que tener previsto un Plan B, ya desde el inicio, pero solo conocido en la órbita de muy pocos, para no restar credibilidad al Plan A.

Aquí quisiera destacar el valor de la confidencialidad. ¡Cuántas operaciones se han malogrado por falta de discreción! Y, para mantener la necesaria reserva, en muchos casos es preciso acudir a la desinformación debidamente dosificada, que no es otra cosa que una medida de defensa.

El sector energético: Una gran Escuela de Negocios.

La mayor parte de mi vida profesional la he dedicado al sector energético y, sobre todo, al subsector eléctrico. Bien es sabido que la electricidad es un bien de primera necesidad y que, en muchos países, su generación, transporte y distribución está nacionalizada. Aunque esté a cargo del inversor privado, la Administración Pública ha de regular el negocio y lo hará siempre por muchas proclamas que se pronuncien sobre la liberalización del subsector .Son negocios regulados y es este su principal riesgo. ¡Que se fijen en los ejemplos históricos!

Y, claro está, en este negocio hay que estar a bien con el gobierno de turno.

En su momento, Iberduero, disponía de un extraordinario mix de generación, básicamente hidroeléctrico. Como el precio de venta del kwh. era unificado, las demás empresas eléctricas que generaban más caro, tenían que recurrir a las llamadas “compensaciones” , para que les cuadraran las cuentas. Ni qué decir  tiene que el gran pagador de compensaciones era Iberduero. Así que la polémica estaba servida, a lo que habría que añadir el tira y afloja anual con la Administración para la subida de tarifas. Una verdadera guerra, para la que había que estar en forma.

La energía, una vaca lechera que acabarán matando.

 

España es un país diferente en el que sus sucesivos gobiernos han visto en las empresas eléctricas una especie de vaca lechera que ordeñan a placer para todo tipo de actividades, con la consecuencia, poco envidiable, de figurar a la cabeza de Europa con el precio más alto del kwh. Acabarán matando a la vaca.

Y porqué el ciudadano es más intolerante con las subidas de la luz que con las de los carburantes? Que me lo expliquen.

Testigo del nacimiento de los Gobiernos Corporativos en las grandes empresas.

 

Un tema recurrente es el Gobierno Corporativo, de moda en España, desde hace poco más de veinte años. Cuando yo llegué a Iberduero, hace ya de esto 36 años, me encontré con un consejo cuyos miembros, sin excepción, representaban a los bancos que habían tenido un papel destacado en la fundación y desarrollo de la compañía. Sólo una excepción: el anterior gerente al que, con ocasión de su jubilación, se le había ofrecido una plaza en el órgano de administración. Esta composición era la habitual en las grandes compañías. Por supuesto, que hablar de Gobierno Corporativo o de “consejeros independientes” era algo que formaba parte de la Ciencia Ficción.

Las cosas han cambiado, pero no tanto. Sostener la existencia de consejeros realmente “independientes” se acerca bastante al insulto a la inteligencia .Han proliferado como setas los llamados “Códigos de Buen Gobierno”, lo que no ha impedido que su publicación haya coincidido con los mayores escándalos financieros de todos los tiempos.

Porque la complejidad y dinamismo del actual momento económico  exige decisiones rápidas, muchas veces adoptadas con insuficiente información, en un entorno cambiante e inseguro.¿ Qué puede aportar un consejero en este escenario?.

Un servicio jurídico de rigor: Vital para las empresas.

 

images (3)Creo en la necesidad de que las grandes corporaciones cuenten con un servicio jurídico de rigor. Hay que evaluar a priori los riesgos legales, lo mismo que los riesgos técnicos o comerciales o financieros. Siempre asistencia preventiva. Seguridad absoluta en cuanto al cumplimiento de la norma y el seguimiento estrecho de los procedimientos. Y ello en distintos sistemas jurídicos.

Siempre he sintonizado bien con los responsables técnicos o económicos que sabían valorar la asistencia jurídica preventiva y recurrían a ella, a diferencia de los que la consideraban un trámite engorroso, a evitar si posible y que luego acudían al servicio cuando el tema, colapsado, no tenía solución .Porque, y es un ejemplo, ¿como no se va a consultar una operación financiera o una agrupación masiva de fincas , con derivaciones complejas , sin consultar previamente con el Registro?

Dispuse de un equipo sólido de abogados, a la mayoría de los cuales contraté personalmente siendo jóvenes y pude formar en el carácter preventivo del asesoramiento y en la necesidad de ofrecer soluciones aunque no fueran “ ortodoxas“. Sabían que no podían presentarme problemas, sino soluciones. Y actuar con sentido común y cintura negociadora.

Un jurista de excepción, como fue Don Fernando Sánchez Calero, Catedrático de Derecho Mercantil y consejero de Iberdrola, que me honró con su amistad , solía recordar las palabras de Don Joaquín Garrigues, maestro de todos,: “El Derecho es para la vida y no al revés”

Me permitiría, por último, dos recomendaciones para los abogados de hoy:

  • La primera, que complementen su formación jurídica con la económica, en particular en lo que a contabilidad y operaciones financieras respecta. Paulatinamente se ha registrado un mayor protagonismo de los economistas en la órbita del Derecho Fiscal, cuando los contenciosos en esta materia han de resolverse por un juez, jurista de formación.
  • La segunda, que implementen el conocimiento de idiomas en grado sumo, hasta dominar el lenguaje jurídico de otros países. Es un ejercicio que recomiendo a cualquiera.

 

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